domingo, 13 de enero de 2013

Cómo cambiar de carrera laboral?


Cambiar de carrera nunca es fácil, especialmente si tienes hijos que mantener, una hipoteca que pagar y un carro que cuidar. Pero si tienes la motivación, lo puedes hacer. He aquí cómo:


1) Hazte esta gran pregunta: Si tuvieras todo el dinero del mundo, ¿qué estarías haciendo? No te contengas. Este es el momento para la lluvia de ideas. Haz una lista de todas las cosas que preferirías estar haciendo con tu tiempo. Tus primeras respuestas serán probablemente algo como esto: Tomar unas vacaciones tropicales, pasar más tiempo con los hijos, etc. Pero abre tu mente a más allá de eso. Pregúntate si estás contento con tus horas de trabajo tan rigurosas, con tener que responder a tus superiores, etc. Si es esto lo que no te gusta, entonces trata de encontrar un trabajo que te dé exactamente lo que deseas o esperas alcanzar.

2) Evalúa tus talentos y habilidades. Pregúntate a ti mismo: ¿para qué soy bueno? ¿Qué es lo que más me gusta hacer? Anota cada habilidad que tengas. No seas tímido. Pregúntate si tu trabajo actual te da satisfacción y si exprime todo tu potencial.

3) Identifica tus habilidades transferibles. Después de decidir qué carrera te acomoda mejor, y una vez que hayas enlistado todas las habilidades y talentos que te conoces, identifica cuáles habilidades te ayudarán más en tu nuevo campo de trabajo. Entre más larga sea la lista, más fácil será la transición. Si cuentas con pocas habilidades o éstas no son transferibles, no te desanimes. Persigue tu pasión para encontrar la felicidad. Recuerda siempre que puedes obtener nuevas habilidades. Las experiencias que ya tienes también harán fácil esta transición. Algunas habilidades básicas de la vida ya las has adquirido. Date algo de crédito y anímate.

4) Piensa en los trabajos que te permitan hacer lo que realmente quieres hacer, al menos de cierta forma, y que te dejen aplicar tus habilidades y tu talento día con día. Sé creativo y abre tu mente. Concéntrate en lo que tus sentimientos te digan que hagas.

5) Acude a entrevistas informativas. Estas entrevistas te ayudarán en dos cosas: te darán información acerca de la profesión que estas considerando de parte de profesionistas en esa rama, y harás contactos con personas que posiblemente tengan el poder de contratarte después.

6) Toma en cuenta tu situación financiera. ¿Cuánto te cuesta, mensual y anualmente mantener tu estilo de vida actual? ¿Estás dispuesto a disminuir tus estándares para obtener un trabajo que te pague menos? Trata de complementar tus ingresos de otras formas. Haz pequeñas inversiones en negocios de medio tiempo que puedan reponer lo que falte, en caso de que tu nueva profesión pague menos. Requiere mucho valor hacer algo que tu corazón desee a costa de pérdida económica. Si es lo que te hará feliz, entonces lánzate.

7) Haz una lista de todo lo que quieres en tu nuevo empleo, y de todo lo que no quieres. Trabaja en dirección a tus necesidades y deseos. Mantente alerta y no te dejes distraer en el camino.

8) Investiga los diferentes puestos que existen en el área en la que quieres trabajar. Visita sitios como Salary.com para averiguar qué tanto puedes ganar en tu nuevo empleo.  También consulta sitios en los que puedas ver qué tan competitivo es el empleo en la bolsa de trabajo.

9) Busca cursos y programas en escuelas locales. Empieza a tomar clases acerca de lo que quieres hacer mientras conservas tu trabajo actual. Relaciónate con tu maestro – él o ella será una buena referencia a la hora de aplicar a un trabajo. Administra bien tu tiempo.

10) Entra de voluntario a organizaciones que se relacionen con la profesión que deseas. Por ejemplo, si quieres trabajar en arquitectura, busca una asociación que construya casas para familias de bajos recursos. ¡Tú obtienes experiencia, y ellos algo de ayuda!

11) Crea contactos. Habla con personas que trabajen en esta área. Explícales tu situación. Pídeles consejos. Dales tu información de contacto. Si lo que dicen es verdad – “No es lo que conoces, sino a quién conoces” – entonces busca los mejores contactos.


En unas cuantas líneas te mostraré las reglas más básicas para las relaciones públicas:

  • Reconoce tu valor como persona, tu contribución y tu poder. “Si tú no puedes, nadie podrá”.

  • Conoce al menos tres personas mayores que estén dentro de la profesión que buscas, para que te aconsejen y te den su aportación profesional.

  • Una de las reglas más importantes es mantenerse en contacto regular con las personas y no solo buscarlas cuando necesitemos algo.

  • Haz un esfuerzo por conocer a la gente en persona en lugar de solo hablar con ellas por teléfono o por correo electrónico.

  • Muéstrate interesado como persona y no solo en buscar oportunidades para tu beneficio.

  • Cuando sepas de alguien que tuvo éxito en algo escríbele formalmente para felicitarlo.

  • Asegúrate de aportar algo en lugar de simplemente esperar algo.

  • No esperes nada más que buena información y consejos, o nuevos contactos.

  • Después de conocer a alguien nuevo, pídele retroalimentación sobre su primera impresión de ti.

  • Sé generoso al agradecerle a la gente que sí te ayuda, ésta es una de las reglas más importantes acerca de los contactos.

  • Haz tu mejor esfuerzo para recordar los nombres de las personas y las conversaciones que tuviste con ellos.

  • No te enfoques únicamente en la gente mayor que tú, otras personas también tienen su propio conocimiento y sus propios contactos.

  • Haz una lista de tus contactos.

  • Asegúrate de dar información y consejo cuando otros te contacten.

  • Las relaciones son para siempre, no solo para un nuevo trabajo. Sigue trabajando en ellas y ellas trabajarán para ti.

12) Ahorra lo suficiente para sobrevivir de 3 a 6 meses, o el tiempo que tú creas que te tomará encontrar un nuevo trabajo que te mantenga adecuadamente. De nuevo, mantente enfocado.

13) Haz un nuevo currículum. Asegúrate de incluir tus objetivos (basados en el paso 1), educación (paso 6) y la experiencia relevante (paso 7). Busca guías de cómo hacer tu CV.

14) Solicita empleos para los que no cumplas con todos los requisitos. Si hay una posición que parezca muy buena para ser verdad y vaya más allá de tus habilidades, aplica de todas formas. Hay muy poco que perder y puede ser que seas exactamente lo que están buscando.

15) ¡Comienza tu búsqueda y buena suerte!


Consejos:
  • Las pasiones vocacionales de la mayoría recaen en tres categorías: enseñanza, sanación y creación. Si tu enfoque está en hacer alguna de estas tres cosas, es más probable que encuentres la satisfacción.
  • Tener un cónyuge con un trabajo estable hace esto mucho más fácil, pero no es necesario. Aunque es bueno buscar el apoyo moral de amigos y familiares.
  • Considera donar tu tiempo si es que te lo permite tu profesión, para ayudarte a agarrar experiencia y conocer personas en el campo.
  • Considera cambiar de puesto dentro de tu lugar de trabajo para que tengas una experiencia más amplia.
  • Busca hacer amistad con tus compañeros de trabajo.
Advertencias:
Ten en cuenta el tiempo que te falta para retirarte de tu profesión actual. Puede ser mejor que te quedes con tu trabajo, retirarte un poco antes y luego buscar otra profesión. Retirarte antes de tiempo cuando tienes un buen plan de retiro puede afectar en tus otras metas.




J. Aquino
Enero 2013,
Santo Domingo, Rep. Dominicana

miércoles, 2 de enero de 2013

Endorfinas


¿Qué son las Endorfinas?


Para aquellos que hacemos deporte y vamos al gimnasio la sensación de sentirnos bien, la vitalidad y la alegría que esto produce cuando lo practicamos tiene una explicación bioquímica en donde las endorfinas serian parte de la respuesta a estas sensaciones.

Nuestro cuerpo es la máquina más poderosa, sabia y sin duda alguna, la más sorprendente de cuántas existen; no sólo es un armazón de huesos, músculos, venas, arterias y cartílagos; es una verdadera caldera dónde se llevan a cabo los hechizos mágicos que día a día nos dotan de vida y de vigor.


El cuerpo humano produce endorfinas y réplicas de drogas que aceleran o inhiben nuestros procesos mentales de manera natural


Como en un gran y sofisticado laboratorio se originan en él, numerosos experimentos que son una fuente de incógnitas para los científicos que habitan nuestro planeta; no por nada se gastan millones de dólares año con año, para descubrir el funcionamiento de cada órgano, sus procesos de desgaste y los factores internos y externos que pueden dañarlo, deteriorarlo y hacerlo morir.

Las endorfinas, son péptidos (pequeñas proteínas) derivados de un precursor producido a nivel de la hipófisis, una pequeña glándula que esta ubicada en la base del cerebro. cuando hacemos deporte esta glándula es estimulada, produciéndose endorfinas en el organismo, las que van a actuar sobre los receptores que causan analgesia, además de producir un efecto sedante similar a los que genera la morfina, un opiode exógeno bastamente conocido por estas mismas propiedades. Es por esto que las endorfinas son consideradas nuestros opiodes endogenos, es decir producidos por nuestro organismo.

Los estudios demuestran que las endorfina son capaces de inhibir las fibras nerviosas que transmiten el dolor, además de actuar a nivel cerebral produciendo experiencias subjetivas, que son sensaciones intensas, bien conocidas por los deportistas como son la disminución de la ansiedad y la sensación de bienestar. Además de la analgesia y sedación antes mencionada.

No solo el deporte y el gimnasio es un estimulo que nos hace secretar endorfinas, ya que en ciertas situaciones de estrés también se a comprobado su producción al igual que en la acupuntura, las relaciones sexuales, la sugestión y también en ciertos bailes rituales o ceremoniales. Es difícil establecer cual de estas actividades es la que mejor estimula la producción de endorfinas. Sin embargo esta demostrado que los ejercicios de resistencia, sí producen un aumento significativo en la secreción de endorfinas.



Es sabido que el ejercicio de resistencia tiene un potente poder antidepresivo, ya que tendría un rol importante en mejorar el estado anímico y subir la autoestima, efectos que probablemente, se cree, estarían mediados por las endorfinas. 

En definitiva el ejercicio físico no solo significa liberación de endorfinas, ya que también esta demostrado que la forma de vida en torno al deporte es saludable por muchas razones mas. 

Esta descrito que el ejercicio en forma sistémica produce una disminución del riesgo cardiovascular, disminuyendo el sedentarismo al igual que la presión arterial, retrasando el inicio de la diabetes en personas con predisposición genética y evita la obesidad, que es considerada la pandemia de nuestro tiempo. 

Estudios recientes muestran que el realizar ejercicios, independiente del tipo (desde aeróbica hasta incluso caminar), por lo menos tres veces a la semana por quince minutos, disminuiría hasta en un 32% el riesgo de demencia en adultos mayores de 65 años, reafirmando el sentido literal de “mente sana en cuerpo sano”.

Evidentemente el deporte es un arma terapéutica que no puede ser reemplazada por la medicina convencional. Es la única medicina que no se vende en las farmacias y aun es gratis, solo depende de nosotros en ocuparla. 

Mas que sentirnos bien por la liberación de endorfinas que produce el ejercicio físico, además de todas las propiedades que se han descrito, el ser deportista es un estilo de vida cada vez mas necesario en este mundo tan ajetreado y vertiginoso. 

Cuando nos sumergimos completamente en este mundo que genera la vida contemporánea, sabemos que no es saludable. por lo tanto la forma de mantener el equilibrio es buscando la esencia de nosotros mismos, en donde aprendemos a trabajar en equipo o bien a reconocer nuestras limitaciones aprendiendo a superarlas, estas virtudes del estilo de vida que es el hacer deporte, se extrapolan a la vida cotidiana siendo necesarias para crear una sociedad mas sana y evolucionada.



J. Aquino
Enero 2013,
Santo Domingo, Rep. Dominicana